Siempre se aprende. Cuando estaba en la Fiscalía Anticorrupción recuerdo una Junta en la que se repartía el caso Banesto. Carlos J. Villarejo, un fiscal jefe grande como muy pocos, estaba empeñado en asignar dos fiscales al caso con relevación de otras funciones. Yo me opuse con tal vehemencia -por considerar una distribución inequitativa- que se cabreó conmigo. Por la tarde le llamé para disculparme por el modo en que le había tratado. Pasó el tiempo y naturalmente Carlos tenía razón. El caso Banesto salió bien y la Fiscalía no fue un lastre en el proceso, sino que actuó con eficacia y con brillantez.
En el Tribunal Penal Internacional encontré un sistema de trabajo distinto: por cierto, ¿sabéis cuantas veces me ha preguntado algún Fiscal General como se trabaja en esos Tribunales?. Exacto, cero. No tiene el tema demasiado interés para ellos. Pero si puedo decir que allí se trabajaba en grupo: varios fiscales, entre 3 y 7, bajo la dirección de uno de ellos que se encargan de sacar un caso complejo, reuniéndose cada dos días, exponiendo resultados, pidiendo cuentas el jefe constantemente, manteniendo la tensión, analizando la posición de las diferentes defensas, explorando debilidades y asegurando fortalezas, en fin, planteando el caso en su integridad.
Cuando aquí veo que en casos de corrupción complejos hay un solo fiscal, o a veces dos, que no pueden con los cientos de miles de folios que se manejan en esas causas, que desisten de investigaciones porque abordarlas retrasaría años la instrucción, que las acusaciones particulares se anticipan en querellas, diligencias, medidas cautelares, a lo que hace el fiscal, pues me da bastante pena y me avergüenza un poco. Digo yo, si la gran ventaja de la Fiscalía es la fungibilidad de sus miembros, que pueden por orden del FGE ser asignados a cualquier tarea, ¿no sería una buena idea asignar durante un tiempo, un año o dos, a varios fiscales -incluso de los mas jóvenes- a esos asuntos de corrupción que tienen escandalizada a la opinión pública y en el punto de mira la eficacia de la Fiscalía, bajo las supervisión de uno de ellos, más experto y que conoce el caso y por supuesto bajo las órdenes del Jefe que corresponda? Digo yo, ¿no hacen eso mismo las mejores defensas? Digo yo, ¿no tiene nadie nada que enseñarnos sobre como se hacen las cosas en otros sitios? No diría nada si la Fiscalía fuera la institución más valorada de los ciudadanos en los asuntos contra la corrupción. O si la corrupción no fuera un problema en nuestro país. Pero no es el caso.
Mucha idea parece no haber. Empieza el juicio en Castellón contra Fabra y la fiscalía anticorrupción se "olvida" recusar por contaminación a los magistrados que ya pretendieron archivar el asunto.
ResponderEliminarHacía mucho que no leía algo tan lúcido en relación con la forma de organizar el trabajo del fiscal y aprovechar el potencial de la institución. Ahora bien, pregunto: si se hace algo así en la fiscalía española, ¿cuánto tardarían en aparecer críticas diciendo que los integrantes de esos equipos son "enchufados", que son de "la rama política", que qué es eso de cambiar lo que se ha hecho toda la vida, que habrá que ver si no hay doble intención, que si la independencia, que si la antigüedad, que si el fiscal jefe es arbitrario al formar el equipo, que con lo que yo he trabajado toda mi vida, entre partido y partido de golf, ahora van a venir estos frikis modernos a creerse Elliot Ness, etc, etc, etc...? Tú mismo reconoces (te honra) que te costó comprenderlo, y de tus palabras se deduce que no te vino mal experimentar qué son y como trabajan los fiscales por ahí para entender la cosa. A menudo leo las opiniones de tus seguidores en este blog. Sinceramente, ¿habrá que mandar a la mayor parte de ellos a pasar una temporada en la La Haya?... Porque si no, lo veo complicado.
ResponderEliminarAnónimo, ni yo ni nadie que tiene la amabilidad de entrar a opinar aquí podemos cambiar nada. Podemos sugerir, pensar, criticar, opinar. Pero los que mantienen este desastre en pie hay que buscarlos en otro lugar; ellos son los inmobilistas, incluso en asuntos que nada tienen que ver con el control de la institución, sino con la eficacia profesional. Hay muchas formas de organizar las cosas, no solo la que nos enseñaron en la Escuela Judicial (ahora CEJ) que viene de mediados del siglo pasado. Pero la soberbia, la falta de interés o de humildad, la convicción de que lo que se aprendió es lo único aceptable, impide cualquier cambio. Gracias por tu comentario. Saludos
ResponderEliminarNo tendría que haber problema si el cambio fuera trasparente, público, bajo reglas conocidas, en igualdad de oportunidades. La corrupción de nuestro modo de trabajar o el de cualquier otro que ideemos viene, vendría, de convertir el mérito y capacidad en la filiación y afinidad, del secretísimo, del oscurantismo, del amiguismo, del politiqueo a las espaldas de la gente, en fin de todo lo que ha convertido este teórico estado de derecho en pura fachada, y a esta Fiscalia en una institución con gente más preocupada de atacar a los que se les ocurre proponer algo que en ver porque somos tan ineficaces en cuanto nos sacan de perseguir el menudeo criminal... para felicidad de los Fabra que en este país, en todas sus regiones, en todas sus instituciones habitan con el beneplácito de un absurdo sistema de justicia.
ResponderEliminarYo creo q no se investiga bien la corrupción y tiene mucho q ver lo q indica Salvador, l forma de trabajar de los fiscales es difícil de cambiar,pero no imposible.
ResponderEliminarPero creo que la corrupción no se investiga bien por razón y lo digo con todos los respetos a los compañeros que integran la fiscalía anticorrupción.
Surgió cómo una especial especial, creada ad hoc para los casos de corrupción, pero yo, que ya tengo mis años siempre he pensado que las nobles intenciones se pervierten y terminan cumpliendo un fin distinto para el que fueron creados y en estos momentos hay periódicos que han publicado artículos llamando a la fiscalía pro corrupción por las actuaciones en algunos casos , calificativo injusto e inmerecido
Dicho lo anterior no estoy de acuerda con el rumbo que esta tomando la investigación de los llamados papeles de Barcenas: la madre del cordero son las posibles adjudicaciones a los donantes y, ¿ esos contratos no se piden? Tampoco me gusta la intervención en materia de preferentes: cajas insolventes, sin beneficios o posibilidad de no obtenerlos, que han vendido productos cuyo pago de intereses estaba condicionado a la obtención de beneficios , esto a mi me parece un negocio jurídico criminalizado donde una de las partes cumple, el comprador de preferentes, y la caja, el vendedor no, sabiendo o al menos representandose la posibilidad de que no existirían beneficios y x tanto no pagarían.al margen, claro esta, de la estrategia comercial, pero en mi opinión el delito está en el origen de la emisión.
ResponderEliminarPara mi la posición de la Fiscalía respecto de las preferentes debería ser empezar considerando las mismas como un fraude, como un fraude tremendo en el caso de entidades insolventes. No caso por caso, sino como una operación fraudulenta de financiación a costa de terceros. Ah, que eso afecta al corazón mismo del sistema financiero? Claro, por eso ha sido posible, y por eso hay que responder con rigor. En cuanto al caso Barcenas, creo que un fiscal solo no puede abarcar tanto: es imposible y a la larga, estéril. Pero estoy de acuerdo contigo en que eso habría que investigarlo, y por eso creo que hay que cambiar el sistema de trabajo: pero esa decisión hay que tomarla desde arriba.
ResponderEliminarNo investiga la fiscalía, mirando a veces para otros lados, aunque no es la única institución (banco de España, Agencia Tributaria, servicio de intervención, t de cuentas, la lista es larga).
ResponderEliminarCorre un chiste por las redes sociales que viene a ser algo así:
-Tiene usted derecho a designar un abogado.
-¿Puedo escoger a la fiscalía anticorrupción?
Desengañemonos, ni la clase política ni este Fiscal General, uno mas, tienen el mas mínimo interés en combatir la corrupción. Si fuera así se unificaria en una única Fiscalía anti crimen organizado las disputadas competencias por las que se pelean los de la nacional, los de antidrogas, y los anticorrupción. Se nombraria los Fiscales que fueran necesario, como se hizo cuando quisieron crear las rimbombantes fiscalia de Sala por materia de la que gozamos, ¿que no hay dinero?, pues se tira de plantilla, se nos saca de informar en registro civil, de los expedientes de dominio, de cuanta materia no sea esencial la presencia del Fiscal, se descentraliza esta materia creando delegaciones de peso allí donde sean necesarias, se dota a los fiscales anticorrupción de a pie de medios y ayuda... en fin nada que al común de los mortales no se le ocurra si tiene verdadero interés en perseguir esta lacra. Si no es así, pues seguiremos con los pactos anticorrupción entre partidos, huecos, huecos... a la espera de que unas "manos limpias" cualquiera nos saquen los colores por denunciar aquello que la Fiscalía no ve o no quiere ver
ResponderEliminarSobre la eficacia de la Fiscalía en la lucha contra la corrupción.
ResponderEliminarSegún el RD de plantillas, la Fiscalía Anticorrupción consta de un Jefe y 15 Fiscales, a los que hay que sumar los Fiscales en comisión de servicio (al menos 3).
Esta Fiscalía es la única que tiene a su disposición a varias Unidades de Apoyo, en concreto:
- Unidad de Apoyo de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria. tiene 10 miembros, con dedicación exclusiva. 5 Inspectores de Hacienda y 5 Técnicos de Hacienda.
- Unidad de Apoyo de la Intervención General del Estado. esta sin funcionarios adscritos en régimen de dedicación exclusiva -creo-.
- Unidad de Policía Judicial de la Policía Nacional. Compuesta por dos grupos, al mando de un Jefe de Sección, y coordinados por un Comisario. En total, 12 funcionarios.
- Unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil. Compuesta por un Comandante, un Capitán, un Alférez, dos Suboficiales y cinco guardias.
Pues bien, según se puede leer en la Memoria FGE de 2013, el trabajo de todos estos efectivos (Fiscales, Inspectores de Hacienda, Policías y Guardias Civiles)en el año 2012, ha sido de:
¡¡¡21 escritos de acusación y 22 juicios!!!.
Es decir, los Fiscales de Anticorrupción tocan ¡¡¡a poco más de un juicio y una calificación por año!!!.
Ahora no me vengan con que son 21, pero muy complicados, voluminosos y demás zarandajas.
Tampoco me digan que trabajan mañana y tarde, los fines de semana, etc. etc.
Porque sencillamente no me lo creo.
Otro aspecto de la cuestión.
En la Fiscalía anticorrupción hay Fiscales de tendencia muy conservadora, junto a otros cercanos a partidos de izquierda. Esto en sí mismo no tiene nada de malo, pues es una manifestación de la pluralidad ideológica de la sociedad española.
En cambio, empieza a serlo cuando los Fiscales son adscritos a un caso determinado atendiendo precisamente a esa afinidad ideológica -creo que no tengo que poner ejemplos concretos de procedimientos actualmente en tramitación-, pues de ella dependerá que ese procedimiento, previsiblemente, progrese o se embarranque.
¿como se asignan los procedimientos en anticorrupción? ¿quién lo decide? ¿con qué criterios?
Las tendencias políticas de estos fiscales si tienen algo de malo, accedieron a esta Fiscalia por su mérito político, por su afinidad ideológica con el Gobierno de turno. Y fue así desde el principio, cuando se nombraba a uno de la AF y a otro de UPF y así. Y a nivel de delegados provinciales más de lo mismo. Y no tienen porque recibir órdenes, saben perfectamente lo que se espera de ellos cuando se les nombra o se les asigna un caso. Y no pasa nada, ni es excepcional, obedece al control asfixiante de las elites políticas de la totalidad del aparato del estado, ¿o qué creéis que se mira a la hora de nombrar Comisarios, Generales de la Guardia Civil, JEMAD, Presidentes del Supremo....?.
ResponderEliminarEntre lo que leo por aquí y lo de la corrupción urbanística de hace unos post me va a dar una depresión.
ResponderEliminar¿Se lucha contra la corrupción?
ResponderEliminarEn primer lugar felicitar este blog y puesto que se trata la corrupción es indignante lo ocurrido en Andalucia con los ERES ,primero se quitaron las competencias de fiscalización en el control de las subvenciones a la Intervención General y ahora le dicen que tenian que haber actuado.
ResponderEliminarEspero que la Fiscalia Anticorrupción actue.-
En primer lugar agradecer la posibilidad de opinar en este blog y puesto que el tema es la corrupción es indignante lo sucedido en Andalucía en materia de los ERES ,primero se les quitan las competencias de fiscalización previa a la Intervención General y ahora los politicos arremeten contra la Intervención Gral despues de dejarla sin competencias ,todo un sistema diseñado para conceder subvenciones sin control Y NULAS .INDIGNANTE QUE LA VERDAD SE CONOZCA
ResponderEliminarOtra pregunta interesante podría ser ¿hay corrupción interna en la fiscalía? ¿se lucha contra ella si es que la hay?
ResponderEliminarTodo el sistema de nombramientos es pura corrupción. Y no, no se lucha contra ella. Es más se estigmatiza al que la pone en duda
ResponderEliminarSobre lo dicho en el primer comentario
ResponderEliminarhttp://www.cuartopoder.es/acotadeperiscopio/la-sospecha-se-instala-en-el-salon/58