sábado, 29 de enero de 2011

OPORTUNIDAD PERDIDA

Cada vez que se habla en la Fiscalía de que entre en vigor una reforma de calado, sea penal o procesal, se oye decir a algún veterano "¡que no me llegue a tocar a mi!"  Y eso ocurre también entre los que pueblan los puestos clave en  la Carrera.  Algunos -incluso- se dedican a luchar porque los cambios no se produzcan; pero la realidad es que por más que algunos se llamen a si mismos profesionales o progresistas, el conservadurismo es una característica esencial en la Carrera Fiscal y creo que también en la judicial.  El PSOE, cuando llegó al poder en 2004, nombrando a un joven magistrado del Tribunal Supremo como Fiscal General, podía haber cambiado las cosas: optaron tan solo por "reequilibrar ideológicamente" los puestos de responsabilidad, con lo que han perpetuado el sistema.  No ha habido más cambios que los de personas, pero no de normas, no de actitudes (son -quizá somos- todos igual de conservadores), no de talante.  Donde mandaban unos, ahora lo hacen otros y mañana volverán los unos.  Pero los hábitos, las normas, la dependencia política, los horarios, las exigencias, los compromisos (o su falta), siguen siendo los mismos.  Y eso lo percibimos en el día a día de nuestro trabajo y de la función que desempeñamos.    Veo -por ejemplo- en Bagdad a un juez de instrucción español averiguando como se produjo un delito cometido contra un español, cuya competencia tiene atribuida la jurisdicción española y cuya investigación ordena el Tribunal Supremo.  Es noticia en todos los periódicos y televisiones.  Pero no veo allí ningún fiscal.

jueves, 27 de enero de 2011

EL CGPJ LO APLAZA OTRA VEZ

Total, ¿que más da?  ¿Que hay varias plazas en el Tribunal Supremo vacantes desde hace años?  ¿Y a ellos qué les importa?  Que juristas de la máxima categoría sean rechazados una y otra vez por la extrema politización y corporativismo de unos pocos, ¿que le importa a esos pocos?  A mi me da bochorno, pero a ellos, plim.

El Consejo, leo hoy, acaba de posponer otra vez el nombramiento de tres magistrados del Tribunal Supremo por desavenencias entre los vocales.  Pero no es que haya desavenencias en cada uno de los puestos, sino que están en plan reparto: si unos admiten a uno para una plaza, los otros ceden a otro en la siguiente.  No es una cosa nueva, claro. Lo llevan haciendo hace tiempo, de manera que puedo recordar alguna pareja de magistrados del Tribunal Supremo que se presentan a si mismos cada uno como la consecuencia del nombramiento del otro.   A mi me gustaría que juristas de la calidad de Antonio del Moral o de Gonzalo Quintero fueran aceptados por si mismos, y que tras su elección todos pudiéramos felicitarnos de tener en el Tribunal Supremo a personas de la máxima categoría profesional.  No como parte obligada de un pacto.  Y me gustaría también que se respetara un poco a las personas que concursan para puestos de esa importancia, la verdad.

martes, 25 de enero de 2011

AHORA (DESDE HACE CINCO AÑOS) LE TOCA A RICARD CABEDO

Me ha llamado la atención la noticia de que los fiscales jefes de la comunidad valenciana han hecho un comunicado apoyando a Ricard Cabedo por los ataques que sufre por su actuación profesional.  Y mirando, mirando, me encuentro con que hace ya cinco años fue la Fiscalía de Alicante la que tuvo que salir en su defensa por las mismas razones.  Y yo me pregunto: en lugar de atacar al Fiscal -que resulta estar respetado por sus compañeros-, ¿no podrían colaborar con él un poco para erradicar la corrupción?  Y si realmente se piensa que el Ministerio Fiscal español está mal diseñado, que es parcial, que está orillado en beneficio del gobierno y todo eso, ¿porqué no intentan cambiar la ley?  No hablo de cambiar al Fiscal del caso que le afecta a cada uno para poner un amiguete, no.  Hablo de cambiar la ley.  Ah!, que eso no ¿verdad?.  Vale, entendido.

domingo, 23 de enero de 2011

DE VUELTA

Pasadas las Navidades, y con el propósito de no aumentar las cargas diarias de trabajo ni de preocupaciones, vuelvo a JI, muy agradecido a María Jesús Moya por lo que se ha preocupado por mi,  y a aquellos que echan de menos la actividad de éste blog.   Vamos a seguir intentando dar claves, opiniones y quejas sobre el funcionamiento de la Justicia española, que necesita de algo que no está ni se espera que aparezca: sentido de Estado.

LA FISCALÍA EN CLAVE DE PODER

Me parece un gravísimo error, origen de los males de nuestra Justicia, el haber concebido la estructura de nuestros Tribunales y de la Fiscalía en claves de poder mucho más que en claves de servicio público.  En la Fiscalía esto es especialmente visible: nombramientos a dedo y por afinidad política a las dos asociaciones mayoritarias en los puestos claves; omisión de cualquier sistema de baremos profesionales; rigidez en la formación de plantillas; corporativismo; opacidad: resulta increíble, realmente increíble que a estas alturas de los tiempos no haya webs de información y contacto con los ciudadanos en todas las Fiscalías españolas, por no hablar del incumplimiento electoral de la web  del Consejo Fiscal; politización...

Un sistema construido sobre la base del servicio público de la Justicia estaría consternado por el más de 1.150.000 asuntos penales pendientes en nuestros Tribunales; por la cantidad de sustitutos que pueblan los escalafones; por los retrasos; por la falta de calidad de nuestra Justicia; por la pobreza de medios;  por la irrelevancia del mérito en beneficio de la afinidad...  Todo esto es penoso

sábado, 22 de enero de 2011

DAVID MARTÍNEZ MADERO

Me enteré ayer, consternado, del fallecimiento de mi compañero y amigo David Martínez Madero.  Uno de esos  fiscales realmente comprometidos con la Justicia, y realmente entregado a la función.  Estuvimos juntos, despacho con despacho, varios años en la Fiscalía Anticorrupción.  Hablaba muy bien francés, y se esforzó en estudiar inglés, día a día, con profesores particulares hasta horas muy avanzadas de la tarde hasta hablarlo correctamente.  Le acompañé en sus primeros viajes a Rumanía, donde dirigió un proyecto europeo durante varios años.  Era tenaz, preparado, serio (con una chispa de humor cargado de inteligente ironía) y muy trabajador.  Lo que ha pasado me hace sentir mal, y me acuerdo ahora sobre todo de su mujer y de su pequeña hija.  ¡Vaya putada!

viernes, 14 de enero de 2011

LEY DEMASIADO PRIVADA

Acabo de leer en la página web de la asociación de Fiscales,- cuyo enlace de acceso se encuentra en el margen de este blog- que la misma ha interpuesto un recurso administrativo contra contra la Orden JUS/2913/2010, de 2 de noviembre, del Ministerio de Justicia por la que se declara en situación administrativa de servicios especiales en la Carrera Fiscal con efectos retroactivos al año 2004, a un compañero nuestro que ocupa un alto cargo en el Ministerio del Interior. El fundamento del recurso es la infracción del artículo 351.f de la Ley Orgánica del Poder Judicial , introducido en una reforma de 2009 que establece la situación de servicios especiales, para los Jueces y Magistrados y Fiscales según artículo 47 del Estatuto, cuando presten servicio en el Ministerio de Justicia o en las Consejerías de Justicia, o asimiladas, de las Comunidades Autónomas, en virtud de nombramiento por Decreto, en cargos que tengan rango inferior al de Ministro o Consejero de Comunidad Autónoma..Además la Disposición Transitoria octava, apartado 6 establece que dicha norma tiene carácter retroactivo desde la fecha del nombramiento, años antes de esta reforma. Hasta ese momento la situación era de excedencia voluntaria, menos beneficiosa para quien ocupa estos cargos
Según se argumenta en el recurso, como en dicho precepto sólo se menciona expresamente el Ministerio de Justicia y no el de Interior, la Orden Ministerial impugnada infringe el principio de legalidad administrativa y debe ser anulada
La moraleja es clara: No se debería legislar pensando en beneficios para personas determinadas, sino en supuestos de hechos generales y en la igualdad de condiciones de todos los ciudadanos, y se evitarían estos “gazapos”

martes, 11 de enero de 2011

DE VUELTA AL TRABAJO

Acabo de reincorporarme al trabajo después de vacaciones y me he parado al leer la información sobre el último Consejo Fiscal
Hay dos cosas que me han llamado la atención :
la primera es la crítica a la asistencia del Fiscal General al Consejo de Ministros extraordinario convocado cuando la crisis de los controladores aéreos. Me parece a mi que conforme al artículo 9 del Estatuto del Ministerio Fiscal, no procede criticar su actuación . E incluso ha de celebrarse que tales reuniones se hagan con luz y taquígrafos, y con la finalidad de respetar la legalidad en una actuación política de naturaleza tan extraordinaria

La segunda cuestión es la conclusión alcanzada por el Consejo Fiscal respecto de la actuación de la Fiscalía en los asuntos Couso y en los vuelos de la Cia, a raiz de las publicaciones de Wikileaks
En esta materia , debo decir que por razones de confianza en la Institución a la que pertenezco, me alegro del apoyo del Consejo Fiscal a la actuación del Fiscal General y de los Fiscales del caso. Es más, en lo que a estos asuntos respecta, deseo además de todo corazón que el tiempo también nos de la razón a todos