martes, 30 de septiembre de 2008

EL VICEPRESIDENTE, TAMBIÉN POR UNANIMIDAD

En realidad estos dias miro tanto las noticias económicas como las que afectan a la Justicia. Porque están pasando cosas serias en ambos mundos. En economía parece como si se derrumbara un modelo: "The party is over" (Se acabó la fiesta) dijo hace un par de dias la Presidenta del Congreso americano. Pero en Justicia la situación no presenta síntomas de mejora: el vicepresidente del CGPJ, tal como venía anunciado hace días desde los partidos políticos, ha sido elegido por los vocales por unanimidad. Ningún problema para nadie. Y no es que yo a priori tenga nada en contra (ni a favor) del elegido: son las formas lo que irritan. Pero vaya, es lo que hay. En estas condiciones yo creo que debe haber un Juez sancionado que alimenta pocas esperanzas.

Y el Fiscal General, en la apertura del año judicial nos anuncia su propósito de impulsar la atribución de la investigación de los delitos al Fiscal. ¿Un brindis al sol? ¿O esta vez va en serio y se van a impulsar las normas, las dotaciones de medios, los acuerdos políticos para que eso sea posible?

domingo, 28 de septiembre de 2008

ES NECESARIO MOTIVAR A QUIENES SOSTIENEN LA JUSTICIA

Cené la otra noche con un grupo de Jueces y Fiscales ya colocados en la parte de arriba del escalafón. Entre nosotros un Magistrado italiano que no daba crédito al sistema de poder que gobierna la justicia española, tanto la judicatura como la fiscalía. Nos contaba la lucha que presentan allí contra las reformas de Berlusconi, que parece haber tomado el sistema español como ejemplo. La verdad es que me daba un poco de verguenza describir el control político de la justicia en nuestro país. Pero si en algo todos estabamos de acuerdo era en que el momento actual de la justicia es gravísimo por la falta de motivación de los más jóvenes, de quienes de hecho sostienen la justicia en España. Jueces y Fiscales que luchan diariamente en infinidad de frentes, en un ambiente de muy escaso reconocimiento. Esto no es meramente un empleo. Aquí hay un componente vocacional que ha de ser estimulado y reconocido. De otra forma lo más valioso, lo más importante de la justicia española se va a acabar perdiendo.

jueves, 25 de septiembre de 2008

PROPONEN UNA AGENDA PARA EL NUEVO CGPJ

La Consejera de Justicia de la Generalitat de Catalunya (del PSC) escribe hoy un artículo en La Vanguardia, en el que defiende el perfil marcadamente político de los nuevos vocales del Consejo, y propone una agenda de cambios profundos para la Justicia desde el CGPJ. Montserrat Tura, que es doctora en medicina y cirugía y especialista en gestión sanitaria, quizá debería hacer un esfuerzo por entender que algunos de quienes hemos decidido dedicarnos a la Administración de Justicia, creemos que la posición del árbitro debe ser neutral. Que hay gente que quiere ser neutral, que hace de su trayectoria un esfuerzo en la búsqueda de las razones de unos y otros con independencia de que militen en un lugar o en otro. Y que consideramos que la política partidista dentro de los Juzgados, de las Fiscalías y dentro del órgano de gobierno de los jueces, hace mucho más mal que bien ya que potencia y estimula valores contrarios a la imparcialidad y a la neutralidad. Por supuesto que la política es necesaria; por supuesto que es imprescindible en la organización del país y en la administración del país. Por supuesto que muchos jueces y fiscales tienen una ideológía y que votan cada cuatro años conforme a la misma. Pero en mi opinión en Justicia el valor que hay que potenciar es que el mejor juez (y fiscal) es el más preparado, el más trabajador, el que tiene más sentido común, el más honesto y el más imparcial. Si la columnista o su familia tuvieran un problema judicial, estoy seguro que preferiría que su causa la viera un juez neutral a otro marcadamente partidista elegido por sus adversarios políticos. ¿O no?

miércoles, 24 de septiembre de 2008

ACIERTA PERALS

Mi querido amigo el Fiscal José Perals acaba de disertar sobre los problemas con los que se enfrenta la Justicia Española en la lucha contra la delincuencia organizada. Creo que acierta en el diagnóstico. Sabe bien de lo que habla. Lleva muchos años batiéndose el cobre en ésta materia en la cual es uno de nuestros más reputados especialistas. Una voz autorizada más que debería tomarse en consideración al afrontar cambios necesarios en nuestra administración de justicia.

¿INTERCAMBIO DE CROMOS?

Hoy se lee en varios medios que existe un malestar entre los jueces progresistas por el nombramiento de Carlos Divar, o incluso que hay "un malestar generalizado en el Tribunal Supremo" por dicho nombramiento. Yo no llegaría a tanto. El nombramiento ha sido una sorpresa, especialmente tras ver durante meses las maniobras que los partidos han hecho para colocar a sus propios candidatos (y el mayor número posible de ellos) en el Consejo. Pero en general, y hablo por lo que yo he oído, se considera al nuevo Presidente un buen nombramiento. Los reproches son consecuencia de la extrañeza: ¿como un magistrado tan comprometido con su fé, tan ajeno a la influencia partidista, tan solidario con sus jueces en tiempos de dificultad, ha podido ser elegido por un gobierno progresista?. Bueno, esa ha sido la sorpresa. Hoy un fino columnista sugiere que esto obedece a un posible cambio de cromos con el Tribunal Constitucional. Francamente, no lo se. Pero el hecho de que como señalaba ayer El País, el nombramiento estuviera hablado con Rajoy desde antes del verano abona cualquier hipótesis.

lunes, 22 de septiembre de 2008

CARLOS DIVAR

Ha sido toda una sorpresa. Trabajé con él en su Juzgado de la Audiencia Nacional. Tengo la mejor de las opiniones de Divar y su elección me parece un acierto. Serio, cordial, ordenado, educadísimo... Solidiario con los Jueces de la Audiencia cuando fueron primero laminados por el PP y luego depurados por el Consejo anterior con aquel asunto del Negro, antes de ser exonerados por el Supremo. Un auténtico juez. Por eso me sorprende más la decisión del Presidente del Gobierno. No doy con las claves. Porque si de lo que se trataba era de nombrar a un juez independiente, ¿porque ha de ser el Presidente del Gobierno quien lo elije? No olvidemos que la elección del Presidente del Consejo es competencia de los vocales, los cuales no están sometidos a ningún tipo de dependencia. Pueden elegir a quien quieran, pero por experiencia sabemos que elegirán mayoritariamente a quienes les digan. ¿Porqué hacer tan patente la situación de subordinación de los Vocales si se va a elegir a un Juez independiente? Porque esa elección, me atrevo a asegurarlo, no va a suponer ninguna ventaja política para el PSOE, y tampoco para el PP. ¿Es una designación consensuada con el Presidente del PP? ¿Estaremos ante el principio de un cambio de modelo? Cuantas dudas...

domingo, 21 de septiembre de 2008

PERFECTO ANDRÉS

Recomiendo la lectura y máxima difusión del artículo de opinión publicado ayer en el País por Perfecto Andrés . Creo que resume , da en el clavo de muchos los problemas de la justicia , y lo mejor, aporta soluciones.

sábado, 20 de septiembre de 2008

ALEGACIONES INICIALES

Algunos fiscales que actúan en el acto del Juicio Oral en caso complejos se lamentan de que en ocasiones los magistrados no se enteran del objeto del proceso hasta bien avanzada la causa. Comparto ese punto de vista, a mi me ha sucedido también. El ponente de la sentencia es claro que normalmente está avisado, pero no los otros dos, y ello es peor cuando uno de esos es el Presidente del Tribunal. Puedo contar anécdotas muy expresivas sobre el particular. Por eso creo que debería introducirse aquí algo que los anglosajones tienen desde siempre: las alegaciones iniciales, el "openning statement". A petición de alguna de las partes podría facultarse al Tribunal para escuchar un resumen del caso antes de empezar el juicio: una presentación de power point, una explicación acompañada de un esquema, o un simple relato hablado del escrito de acusación estoy seguro de que ayudaría a los jueces a entender el asunto a tiempo, y desde luego al Fiscal le ahorraría sorpresas como la de que tras meses de juicio algún miembro del Tribunal no conociera los hechos fundamentales alegados por la acusación.

Salvador Viada

CURSO EN MARIÑAN (FINAL)

La última jornada nos trajo a los representantes del PSOE, PP y CiU. Hablaron de consenso, de ganas de evitar hacer de la Justicia un objeto de la contienda política, de su disposición de afrontar la reforma de la LECr., y el representante del PSOE manifestó su disposición a atribuir la investigación al Fiscal, subordinada al consenso con el PP en esta materia. El del PP, un tipo agradable por otra parte, hizo unos chistecitos malos para cubrir el expediente tras decir, textualmente, que él no tenía mucha idea de esto y que había venido sustituyendo a un compañero. La verdad es que da que pensar el interés que quienes han de gobernar España en el futuro muestran por estos temas. Pero bueno, lo que mas me ha gustado del curso ha sido la intervención en el cierre del curso del Teniente Fiscal, Martín Casallo. Fue muy claro al señalar que esta situación de la Justicia no podía seguir así tras más de treinta años de parches y reparches. No podrán los diputados decir que no se les explicó el problema con toda claridad.

Una idea que da que pensar por el hecho de haberse repetido varias veces como alternativa a la investigación del Fiscal, y además por ponentes muy autorizados, es la de constreñir la actividad del Juez de Instrucción a lo que le pidan las partes. El Juez no podría hacer nada más que eso. Yo no creo que eso solucionara ningún problema estructural de la Justicia, ya que de esa manera el Fiscal estaría trabajando en la instrucción junto con el Juez: los dos haciendo lo mismo, otra vez, con muchos otros problemas añadidos. Pero me temo -no solo yo, también otros compañeros más agudos que yo en la percepción llegaron a esa conclusión- que esa posibilidad se está barajando muy en serio. Veremos.

jueves, 18 de septiembre de 2008

CARRAU, UN TIPO EFICAZ

No conozco a Juan Carrau, Fiscal delegado de Anticorrupción de Baleares. Pero leo lo que hace y hablo con sus compañeros en la Fiscalía. Todo lo que escucho me parece bien. Acusaron a la Fiscalía de Baleares de acusar tan solo a un sector de los presuntos corruptos. Hoy leemos en la prensa que no es cierto: actúan -él y su compañero Horrach, como en general todos los Fiscales- con imparcialidad y en este caso además con una tenacidad extraordinaria en circunstancias muy difíciles. Y además, el hecho de que no aparezca su cara por ningún lado, todavía me gusta más. A seguir.

CURSO EN MARIÑÁN...

Hoy, nada de interés. Parece que nadie sabe mucho cual va a ser el destino del proyecto de cambio en el proceso penal, por lo que todos nos movemos en la ambiguedad y en la incertidumbre. Aún así, me interesa combatir aquí una argumentación frecuente especialmente de la Asociación de Fiscales, que se muestra renuente a aceptar la idea de la atribución de la instrucción al Fiscal. El argumento utilizado no es el de que no quieren el cambio, sino que como no hay medios suficientes, pues es algo inviable. Ese argumento me parece insuficiente, y que esconde -aunque no mucho- una opinión semejante a la que maneja el PP. Lo importante, creo, es la decisión de acometer un proyecto, y luego -tomada la decisión- ponerla en práctica. Para construir el AVE es preciso decidirlo y ponerse a poner las vías. Es imposible que el AVE circule por las vías del metro. Por eso, lo primero es decidir el objetivo y luego ponerse a trabajar sobre él. Nadie va a dotar de medios a la Fiscalía para investigar hasta que no se tome la decisión de atribuirle dicha función. Es completamente lógico. La atribución de la instrucción al Fiscal sería un cambio importantísimo en la Justicia española, que daría racionalidad al sistema, garantizaría la efectividad del principio acusatorio, unificaría la aplicación de las leyes, modernizaría las instalaciones, y daría un enorme impulso a la Fiscalía al dinamizarla y permitirle su desarrollo natural. A pesar de que de la situación actual es considerada como desastrosa en medios materiales y en normativa aplicable, las resistencias al cambio son muy importantes. A mi me cuesta entenderlo, en ocasiones.

CURSO EN MARIÑAN SOBRE LA ATRIBUCIÓN DE LA INSTRUCCIÓN AL FISCAL

Ha empezado esta mañana en el Pazo de Marián, cerca de La Coruña, un curso dirigido por Juan Ignacio Campos, Fiscal de Sala del Tribunal Supremo, sobre la posible atribución de la investigación de los delitos al Fiscal. Unos cuarenta fiscales asisten a las conferencias, en las que se aprecian las dos tendencias que existen en la carrera: quienes se muestran partidarios (que intuyo que somos mayoría) y quienes se oponen. Todos están -estamos- sin embargo de acuerdo en algo: la situación actual de la Justicia y de la Fiscalía es crítica en cuanto a dotación de medios materiales y de recursos humanos. Mientras el catedrático Jimeno Sendra se ha mostrado un decidido partidario de cambiar el sistema actual -sin conferir sin embargo mayores garantías de imparcialidad para el Fiscal-, el Fiscal Jefe de Valencia, Ricard Cabedo ha planteado la imposibilidad de cambiar el sistema con el desastre estructural que tenemos ahora. Las asociaciones de fiscales se han dividido: la UPF, urgiendo el cambio; la Independiente, brillantemente representada por el joven Fiscal de Pontevedra David de la Fuente, a favor del cambio, pero resaltando la necesidad de reforzar las garantías de imparcialidad de la Fiscalía; la AF, entre dos aguas, que bueno, que si, pero que ahora no porque no hay medios.

Mañana seguiremos, pero ahora que escribo estas lineas, lo hago emocionado por un extraordinario concierto de ópera al que acabo de asistir en La Coruña. En fin, esto de los cursos también deja algo de tiempo para el ocio y la cultura..., y hoy he tenido suerte.

lunes, 15 de septiembre de 2008

¡ES UN CLAMOR!

Uno va desde las opiniones de izquierda hasta las de derecha. Jueces, fiscales, periodistas, profesores, periódicos... Todo el mundo coincide que esto es un desastre, que no hay manera de tener una justicia imparcial sino es independiente. Y todo el mundo critica el modo de elegir a los vocales del Consejo, ese reparto de influencias entre los grandes partidos que se ha hecho abiertamente, sin disimulo alguno. Hoy es en la Gaceta de los Negocios donde se lee un artículo de crítica por un conocido catedrático, que habla de "un desastre para España". Pero puedo citar muchas más críticas en dias pasados, y también las veremos mañana. Algo debe fallar en nuestro sistema cuando frente a ese clamor de opiniones, que sobre otras cuestiones habrían de tener alguna influencia para cambiar las cosas, en matera de Justicia no significan mucho más que un coro de grillos cantando en el campo.

El daño de esta elección, ¿no se dan cuenta los partidos? en ocasiones se traslada a los propios vocales. Todavía se puede leer un artículo terrible -seguramente sectario- sobre determinadas decisiones jurisdiccionales de algunos de los jueces elegidos. Decisiones sin duda impecables en su momento, pero que a la luz de los nombramientos posteriores, adquieren un sentido muy triste.

sábado, 13 de septiembre de 2008

¿S.O.S.?

Las STC 94/2008 y la 93 / 2008 , ambas de 21 de julio, resuelven sendos recursos de amparo por dilaciones indebidas en dos procedimientos abreviados contencioso administrativos.
En ambos casos los recurrentes consideraban que el plazo que había desde la providencia de señalamiento hasta el día señalado para la vista ( entre 18 y 20 meses según el caso ) , vulneraba su derecho a un proceso por dilaciones indebidas.
Lo cierto es que en uno de ellos, el que recoge la STC 94 / 08 se deniega el amparo porque si bien se está señalando a 20 meses vista , ello se debe a "problemas de organización de la agenda" no a la pasividad del órgano judicial .
Lo que más sorprende de la sentencia 94 / 08 es el recordatorio que lanza el Tribunal Constitucional tras dicha decisión que, textualmente, señala : "Conclusión ésta que, por otra parte, no es óbice para recordar la necesidad de que el Estado, dentro de las disponibilidades presupuestarias existentes en cada momento, adopte las medidas pertinentes para que los Jueces y Tribunales puedan cumplir su función jurisdiccional con la mayor prontitud posible, dado el lugar que la recta y eficaz Administración de Justicia ocupa en una sociedad democrática."
No sé , me dio la sensación de encontrar un mensaje de socorro.

JUECES SANCIONADOS

Coincidiendo con la sanción impuesta al Juez Tirado , se lee estos días en la prensa el caso de otra sanción impuesta por el CGPJ a un Juez de lo social de Toledo .
Son casos muy distintos: el juez Tirado ha sido objeto de sanción a raíz del retraso en el caso Mari Luz ; las sanciones impuestas al juez de lo social de Toledo lo son por abuso de autoridad . Ambos casos tienen sin embargo un denominador común : el estado de la Administración de Justicia, que adolece, además de falta de medios, de otros males .
Creo que ambos casos no son los únicos . Hay retraso en muchos procedimientos y existen situaciones de abuso de autoridad. Son casos aislados , pero existen . Y que perjudican está fuera de duda. Por ello me atrevo a sugerir que de cara a evitar situaciones como la de Sevilla o Toledo se adopten a tiempo las medidas necesarias para evitar que la imagen social de la Administración de Justicia se vea tan perjudicada .

viernes, 12 de septiembre de 2008

A MI TAMPOCO ME GUSTA EL DISEÑO DEL CGPJ

He escuchado esta mañana las declaraciones del Ministro de Justicia en las que ha prometido, sobre todo lo demás, mejorar la gestión de la Justicia. Ojalá lo haga, pues mucha falta hace. Pero leo la reseña de la entrevista en la que se destacan los cambios que anuncia en el diseño del CGPJ, ya que el actual "no le gusta". Bueno, a mi tampoco me gusta nada. Pero no es fácil elegir un modelo. Porque el que más me gustaría a mi habría de ser un modelo que garantizara la pérdida de influencia de los partidos en el órgano de Gobierno del Poder Judicial. Y claro, con dos asociaciones de jueces que han aceptado su papel de correas de transmisión de las principales decisiones de los partidos, a cambio de prebendas varias, pues no confío tampoco yo en que el Poder Judicial estaría mejor gobernado por esas asociaciones. De manera que la cosa no es nada fácil. Quizás regulando el sistema de elección de los candidatos judiciales de manera que los no asociados tuvieran alguna oportunidad (por ejemplo, financiando las campañas electorales de esos candidatos, al igual que se hace con los de las asociaciones); y confiando la decisión sobre el resto de los miembros del Consejo a Colegios de Abogados, Universidades, Sindicatos y las Carreras Fiscal y de Secretarios Judiales, quizá entonces el Consejo pudiera no ver reflejada la fuerza de los partidos en su seno. Pero es claro que salidas de este tipo no le van a gustar a nadie que aspire a aumentar su poder sobre la Justicia, así que nada, a seguir mal.

jueves, 11 de septiembre de 2008

MAS MODIFICACIONES EN EL CÓDIGO PENAL

Ya nos hemos acostumbrado. Tras la aprobación contrareloj del Código Penal de 1995 (por cierto con la abstención del PP) se nos decía que el nuevo Código "de la democracia" iba a fijar la expresión definitiva del marco de derechos, libertades y valores constitucionalmente diseñados. Pues no. Desde entonces son más de 20 las reformas que el Código ha tenido. En algunos momentos, hasta cinco eran las leyes penales intermedias que podían concurrir a la calificación de un mismo hecho punible. Ahora se anuncia otra reforma sustancial. Para mi no se trata de estar o no de acuerdo con esas reformas. Yo creo que esto es un defecto de método. Un Código Penal, como sabemos los que trabajamos en ello diariamente, debe tener estabilidad. No debería ser un instrumento coyuntural para arbitrar medidas que mostraran la eficacia o no en la represión de los delitos. Es cierto que vivimos tiempos de cambio: los avances tecnológicos, la producción legislativa de la Unión Europea, los nuevos fenómenos delictivos... Pero aún así, yo echo de menos un buen trabajo de preparación legislativa, con amplios consensos políticos y técnicos.

martes, 9 de septiembre de 2008

LOS NO ASOCIADOS Y OTROS NEUTRALES

El Pais publica hoy un artículo en el que demuestra el maltrato de los partidos políticos a los no asociados (y a los no afines), en el proceso de designación de Vocales del Consejo. El Consejo es el órgano de Gobierno de todos los jueces, asociados y no asociados. Por ello desde el punto de vista de la Carrera Judicial, debería haber una representación parecida de unos y otros. Pero eso no es posible por la extrema politización a que lleva el actual sistema de elección de los vocales y la persistente voluntad de los partidos de controlar al Consejo. Así, las asociaciones afines a los grandes partidos son quienes tienen más vocales. La segunda asociación de Jueces, Francisco de Vitoria, solo consigue un vocal. Y según se dice por ahí, porque tiene vínculos de estrecho parentesco con un destacado político andaluz. El panorama es muy triste, en mi opinión. Pasa igual que en la Fiscalía, donde las asociaciones afines reciben subvenciones importantes del Ministerio mientras que la única asociación neutral (la Independiente) ve negada cualquier ayuda para competir en condiciones de mínima igualdad con las otras. Parece que hasta la fecha, eso no interesa. En fin, ya veremos.

lunes, 8 de septiembre de 2008

SATISFACCIÓN EN EL PP CON EL NUEVO CONSEJO

"Bien está lo que bien acaba", ha dicho el Portavoz de la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados, en relación con el acuerdo sobre el acuerdo sobre el CGPJ. Satisfacción, pues. Pero a mi me parece que -desde la perspectiva de lo que uno lee en el programa electoral del PP- que esto no debería estar tan bien (recordemos que el PP decía que quería cambiar el sistema de elección de los vocales), y por tanto no ha acabado tan bien. Y además, después de dos años saboteando los acuerdos para cambiar el Consejo, a mi me parece que aunque haya acabado bien para el PP, eso no ha estado bien. Pero vaya, cada uno tiene su opinión y si así convencen a alguien pues que sigan felices.

Otro aspecto que leo en la noticia y que me llama la atención es que se habla desde el PP de acometer la "revolución pendiente" en la Justicia. Van a tener que hacer algo más que decirlo para que yo me lo crea, despues de lo ocurrido durante su mayoría absoluta. Pero bueno, es un principio. Esa "revolución pendiente" está ligada a un nuevo proceso (supongo que penal), pero de las características de ese proceso no se dan pistas. ¿Estarán pensando en un proceso penal moderno, o en modernizar el que tenemos?

domingo, 7 de septiembre de 2008

MARIA TERESA GALVEZ A EUROJUST

El BOE del sábado publicaba el nombramiento acordado en el Consejo de Ministros del día anterior de Maria Teresa Galvez, co fundadora de este blog, como asistente de la representación española en Eurojust. Por pura elegancia no voy a hacer valoraciones sobre el acierto del nombramiento, pero si quiero expresar aquí mi felicitación a la nombrada y la satisfacción que tengo de ver a una gran fiscal que consigue lo que desea, manteniendo sus principios.

viernes, 5 de septiembre de 2008

LA TARTA DE LA JUSTICIA, POR ROSA DIEZ

Publicaba ayer un artículo Rosa Díez en su Blog, en el que se adivinaba mucho más que discrepancia por el proceso de control de la Justicia por los partidos mayoritarios. El texto destilaba indignación. Y es que, al margen de las gruesas palabras que la diputada iba incluyendo, esa opinión refleja la triste realidad en a la que se conduce a la Justicia en España. Una noticia hoy de El País, ilustra mejor que cualquier argumentación lo que queremos decir. Se titula la noticia "Zapatero baraja cuatro candidatos para presidir un CGPJ muy político". Y en ella se puede leer el párrafo siguiente:

"El presidente decidirá, pero deberán elegirlo los vocales en su primera reunión, prevista para la última quincena de septiembre".

Así se recoge, con toda normalidad. Es decir, que a los vocales que elegirán libremente a su presidente, les van a dar el pastel ya cocinado. Y si aceptan eso y desde el mismo principio, ¿no es lógico que se les ordenen (no se me ocurre otra palabra más adecuada) otras cosas a lo largo de los años de mandato?. No solo es lógico, es que es así. Por eso, la indignación de Rosa Díez y de muchas otras personas es perfectamente lógica.

Lo triste es que no se sacrifica la independencia de la Justicia en aras de que esta funcione mejor; se la sacrifica por nada, por nada perceptible para el ciudadano. Se la sacrifica únicamente por ampliar el poder de los partidos políticos en un terreno en el que su influencia debería ser mínima. Pero esto es lo que hay.

jueves, 4 de septiembre de 2008

LA POLEMICA SOBRE LA SANCIÓN AL JUEZ TIRADO

Leo que todos los partidos políticos se han pronunciado por una sanción ejemplar contra el Juez Rafael Tirado de Sevilla. Ese Juez, al que no tengo el gusto de conocer, seguramente será culpable de algunas cosas, y si es así me parece estupendo que responda de ellas. Pero no es culpable de otras que parece que son las que determinan la unanimidad política en reclamar su cabeza. No es el Juez Tirado culpable de que desde décadas el Parlamento, el Ministerio de Justicia y el Consejo del Poder Judicial hayan permitido que en muchísimos Juzgados de lo Penal se arrastre un atraso tremendo en la ejecución de las sentencias; no tiene el Juez Tirado la culpa de que en los Juzgados no se disponga de un sistema informático centralizado en el que salten las circunstancias e incidencias procesales que afectan a los acusados en cualquier otro Juzgado o Tribunal español; tampoco tiene la culpa de que en los Juzgados no se tenga acceso a las bases de datos de la Policía sobre el historial de detenciones de los acusados; ni de la pobre dotación de personal que tenía su Juzgado, ni de la falta de recursos para organizar la prestación del servicio de los funcionarios en horarios de tarde; ni de que las penas con que se castigaban los delitos por los que fue condenado el asesino de Mari Luz fueran tan leves. De todo eso tienen la culpa otros, y además desde hace mucho, mucho tiempo. Es un tema ligado al buen funcionamiento de la Justicia en España, y de eso tampoco tiene toda la culpa el Juez Tirado. Por eso me parece a mi que algunos de los que reclaman la cabeza del Juez deberían reflexionar honestamente si no deberían dimitir primero de sus cargos, en una justa asunción de responsabilidades.

JOSE MARIA CABALLERO PONE EL DEDO EN LA LLAGA (Y 3)

VI
Con ser grave que la renovación de los cargos relevantes en la Carrera Fiscal se efectúe en razón de la ideología política (real o supuesta) de cada cual, lo es más aún, que tan corrompido sistema se haya extendido a un número elevadísimo de plazas, que no obstante no llevar aparejadas responsabilidades decisoras, se considera deben proveerse no por antigüedad, sino por designación, pretendiendo así la composición de Fiscalías en las que resulte más fácil obtener mayorías o unanimidades que puedan posteriormente ofrecerse a la opinión pública como coartada de la adopción de decisiones gratas al poder político.
Al margen de la Fiscalía del Tribunal Supremo, en la que tradicionalmente se han cubierto sus plazas por el método de la designación, es lo cierto que en la última reforma del Estatuto Orgánico, se han sumado al sistema, la Fiscalía ante el Tribunal Constitucional, la Fiscalía del Tribunal de Cuentas; la Inspección Fiscal y las denominadas Fiscalías Especiales.
Parece ser que quienes entusiásticamente promovieron el sentido de dicha reforma en el año 2003, pensaban que el Partido Popular gobernaría in aeternum , y ahora comprueban con hipócrita escándalo, que la fórmula se ha vuelto en su contra.

VII
Hay otros modos de reconocer e identificar lo que puedan ser los conceptos de mérito y capacidad, y ello nos conduce al capítulo de las retribuciones, o las sanciones, por las actuaciones profesionales en el despacho de asuntos de relevancia política. Son al parecer éstos últimos, los que definen el concepto de lo meritorio y de lo no meritorio, y alcanzan tan paradójicas consecuencias, que en alguna ocasión, han constituído la base para que un Fiscal General adoptara una medida cuasi-disciplinaria de traslado de una sección a otra dentro de la Fiscalía del Tribunal Supremo, al no compartir el sentido del informe de un Fiscal, y para que más tarde, el siguiente Fiscal General, estimara el mismo informe como un dato relevante para sustentar el nombramiento para la Jefatura de una Fiscalía. No es desde luego el único ejemplo en el que sin demasiada perspicacia, se adivina la realidad del premio por una actuación profesional satisfactoria para al Poder Ejecutivo.

VIII
La política de nombramientos es, en fin, un importante tema, pero desde luego no el único que nos puede interesar y mover a participar en un proyecto, en el que frente al dirigismo y adocenamiento al que nos conducen las asociaciones, constiuídas en meros grupos de presión defensores de sus asociados y no de la Carrera Fiscal en su conjunto, ni de la Institución del Ministerio Fiscal, es posible hallar otros cauces de participación ágiles, sin la rémora de hipotecas ideológicas y que haga recuperar a la Institución el dignísimo papel que le corresponde.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

JOSE MARÍA CABALLERO PONE EL DEDO EN LA LLAGA (2)

IV

Quizá tenga alguna razón la AF cuando en defensa de su actuación, sostiene que es mayoritaria en la Carrera y en el Consejo Fiscal y que por tanto, asumiendo la representación democrática de aquella, le compete proponer a los candidatos de su preferencia.
Sin embargo, éste argumento resulta a mi entender falaz, pues si se afirma una representación democrática, ello será porque al actuar como mandataria, goce de una legitimación de origen. Y es precisamente éste último aspecto, el que en mi opinión, no acaba de ajustarse a la realidad de las sociedades democráticas, pues la legitimación para la designación de cargos públicos, esto es, pagados por todos los ciudadanos y obligados a actuar en el exclusivo beneficio de éstos, debe derivarse de los propios ciudadanos y no de una asociación corporativa cuya única finalidad es la de la postulación de los intereses profesionales de la Carrera o Cuerpo.
Ahora bien, como tal elección ciudadana es obvio que no está prevista en la Ley, debieran entonces los designados por el cuerpo electoral, obtener la legitimación de ejercicio, o lo que es igual, su habilitación como representantes ciudadanos mediante la aplicación de la Ley en sus decisiones, única y exclusivamente. Y la Ley, en el aspecto que analizo, es de una claridad meridiana: mérito y capacidad, y no éstas dos cualidades sumadas a la ideología política y a la adscripción asociativa.

V

Llegados a éste punto, quizá convenga examinar que deba entenderse por mérito y capacidad y como puedan llegar a valorarse tales requisitos.
Por no referirme a tiempos muy remotos, valgan algunas de las decisiones de los últimos años. Así por ejemplo, la promoción a la categoría de Fiscal de Sala, de compañeros de indisimulada ideología política, -casualmente coincidente con la del Gobierno y el Fiscal General de turno-, mediante el procedimiento abreviado, ésto es, la Jefatura de la Secretaría Técnica. El mérito en éste caso ha sido el de la sintonía política con el Fiscal General. En otras ocasiones, los miembros del Consejo Fiscal, les han consolidado en la categoría 1ª de la Carrera, mediante su propuesta para servir otra plaza, antes de que la modificación del Estatuto otorgara la categoría 1ª solo durante el desempeño del cargo de Fiscal-Jefe de la Secretaría Técnica.
En el momento actual, ya no será necesario tan voluntarioso empeño, pues la situación ha sufrido un nuevo cambio, y la reforma del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, prevé, que tras el servicio del cargo por un tiempo de tres años, el Fiscal-Jefe de la Secretaría Técnica, podrá consolidar definitivamente la categoría 1ª. Es decir, la reedición del procedimiento abreviado.
Existen otros modos de valorar el mérito y la capacidad, como lo es el habitualmente invocado –que no fielmente aplicado- por la AF, del criterio de la antigüedad escalafonal. Es curioso, que cuando el candidato –asociado- de la AF es el más antiguo de los peticionarios, la defensa de tal criterio en las sesiones del Consejo Fiscal, aparece como una exigencia absolutamente innegociable. Ahora bien, si el candidato no es el más antiguo, entonces se ofrecen argumentaciones alternativas, como la de que dentro de una misma promoción, la antigüedad no debe –en ese caso- regir; o bien que si el candidato apadrinado no resultó elegido para determinada plaza en una anterior sesión del Consejo Fiscal, entonces es de justicia que ahora haya de dársele satisfacción votándole en éste segundo intento, aunque ello suponga la preterición del otro u otros candidatos que legítimamente aspiran a una plaza y que invocan su mayor antigüedad escalafonal. Es decir, a los excluídos y no “apadrinados” por no ser asociados, se les hace expiar la culpa de que el protegido no hubiera obtenido antes la plaza que pretendía.
Los criterios que maneja la UPF, no son muy diferentes, ni pueden considerarse de superior contenido ético que los empleados por su asociación émula; en éste caso, el criterio definitivo es el de la pura y simple condición de asociado, o en su defecto, el mérito se halla en la interesada propagación pública de una ideología que el mismo Fiscal que se autopostula, califica “de izquierdas” o “progresista”.
Los resultados de todo ello no pueden ser más desalentadores, y sin ningún tipo de pudor, se defiende por una asociación, por ejemplo, la legitimidad de la falta de confirmación de un prestigioso Fiscal de Sala al término de sus cinco años de mandato, -aún restándole tan solo dos para la jubilación-, llevada a cabo por un Fiscal General nombrado por la derecha; y más tarde, y por la otra asociación, se apoya la no renovación de otro Fiscal de Sala, igualmente prestigioso, cuando quien decide entonces, es un Fiscal General nombrado por un gobierno de izquierda.

martes, 2 de septiembre de 2008

JOSE MARIA CABALLERO PONE EL DEDO EN LA LLAGA (1)

El Fiscal del Tribunal Constitucional Jose María Caballero, gran compañero por demás, envía a Justicia Imparcial un texto extenso en el que señala con todo acierto los principales problemas que afectan a la carrera fiscal en lo que se refiere a la salvaguardia de su imparcialidad. No se trata de una opinión más. Jose María es lo que podríamos llamar un peso pesado en la Fiscalía, que ha desempeñado cargos de gran responsabilidad en la Carrera. Publico su texto en tres entregas, que se iran colocando a lo largo de esta semana, para hacer más sencilla su lectura y asimilación. Y le doy desde aquí las gracias al compañero por la atención que nos presta.


I
La situación que atraviesan la Carrera Fiscal y el Ministerio Fiscal desde hace ya demasiado tiempo, no permiten una actitud pasiva, meramente conformista y resignada. El constante desprestigio de la Institución ante los ciudadanos y el desaliento que en muchos de los compañeros se adivina, obligan a la adopción de una voluntad participativa que se manifieste en el impulso corporativo de quienes mejor conocemos la situación del Ministerio Público, -los propios Fiscales-, cuyo desentendimiento de la cuestión (adviértanse los escasísimos índices de participación en las sucesivas elecciones al Consejo Fiscal), no debiera mantenerse por más tiempo.

II
Sin ánimo de ser exhaustivo, y a título de mero ejemplo, puede traerse a colación como uno de los aspectos en los que con mayor claridad se advierte la preterición de los planteamientos estrictamente profesionales de la Carrera Fiscal, así como la actuación interesada e incluso sectaria de las asociaciones, el relativo a la denominada –nunca mejor dicho- “política” de nombramientos.

Las decisiones adoptadas en ésta materia en el seno del Consejo Fiscal cuyo cese se produjo en el año 2005, así como las del nuevo Consejo constituído el día 13 de julio del mismo año, no han hecho sino reiterar el ya largamente consolidado sistema de provisión de cargos públicos que desde hace tantos años viene imperando en el Ministerio Fiscal. En dicha práctica, es considerado como criterio principal y determinante, -a veces incluso único- para la valoración de los méritos de los candidatos concurrentes, su respectiva adscripción asociativa, reforzándose de éste modo el poder de las asociaciones y de su correspondiente identificación ideológica, que pretendidamente encubierta de modo voluntarista bajo el pretexto de la defensa y promoción de los intereses profesionales de los Fiscales y del mejor cumplimiento de los fines de la Institución en la que servimos, no logra ocultar la realidad de la plena asunción del contenido programático de las dos principales opciones políticas de nuestro sistema parlamentario.
No quiero decir con ello, ni mucho menos, que los compañeros cuyos nombramientos se han ido proponiendo al Ministerio de Justicia, no reunieran los requisitos de mérito y capacidad que los puestos asignados exigen y la Constitución impone como criterio rector; muy al contrario, un somero examen de sus respectivas ejecutorias profesionales, lleva a afirmar sin ambages, la elevada cualificación de la mayor parte de ellos para el desempeño de los cometidos asignados.
Ahora bien, que los propuestos reúnan tales capacidades, no significa que éstas no sean también ostentadas por la mayor parte de los funcionarios que integramos la Carrera Fiscal, y que en principio, cumpliendo las exigencias estatutarias en cada caso, cualquiera pueda tener la legítima aspiración de pretender la plaza a la que opte, en la convicción de que los criterios empleados al valorar sus méritos, serán plenamente objetivos, sin que la fatal incidencia de los postulados ideológicos de las asociaciones, se constituya en elemento condicionante cuando no decisivo.
Urge pues recordar la obviedad de la general vocación de los Fiscales al desempeño de los distintos cargos, limitando el poder de las asociaciones, de modo que éstas –en tanto disponen de un número relativamente escaso de asociados frente a los Fiscales no asociados (30%)-, no continúen imponiendo a toda la Carrera sus candidatos, y que tras cumplir éstos las exigencias de mérito y capacidad –comunes como se ha dicho a la inmensa mayoría de los Fiscales-, no se erija en elemento determinante su adscripción ideológica, por no decir política.

III
Un examen de las decisiones de los distintos Consejos Fiscales, conduce en gran parte a la incredulidad o a la sorpresa, cuando no a la indignación, confluyendo todas éstas expresiones en el desánimo y el escepticismo que en parte significativa de los compañeros se advierte. Esta injusta situación, se ha venido manteniendo invariada a lo largo de los mandatos de los distintos Fiscales Generales, ya fueran éstos nombrados por gobiernos de la derecha o de la izquierda.
Curiosamente, cuando el Fiscal General pertenece a la primera de las referidas adscripciones y en el Consejo ostenta la mayoría la AF, se producen por parte de la UPF agrias denuncias de nepotismo y de servicio al poder, -seguramente justificadas-, imputándose a éste su inadmisible incursión en un ámbito tan próximo e influyente en el Poder Judicial, como lo es el Ministerio Público.
Cuando cambia el Fiscal General y se designa para el cargo a aquel que mejor sintoniza con la izquierda política, y éste hace valer en el seno del Consejo Fiscal el criterio de la habitual minoría de la UPF, la reacción de la Asociación de Fiscales no se hace esperar: el poder ejecutivo ha invadido una vez más la sacrosanta independencia de la Justicia. Es reseñable que tan cínico escándalo no llega nunca a reparar en el protagonismo pretérito de la propia asociación en idéntico comportamiento.

Ahora bien, lo que en éste punto rebasa con creces todos los límites de la ética profesional, es la denominada política de consenso. Los nombramientos se consensúan, y se hace obligado el establecimiento de cuotas, de modo que a mayor representación en el Consejo Fiscal de una asociación frente a la otra, le ha de corresponder mayor número de puestos, sin que ello impida que la minoritaria pueda colocar a sus candidatos. Incluso, cuando se temen las decisiones del algún Fiscal General que amenaza con proscribir a cualquier candidato de la asociación de ideología contraria a la propia, se contemporiza y negocia, proponiendo vergonzantes pactos en los que se acuerda un reparto igualitario de nombramientos, y ocasionalmente, alguna dadivosa cesión para con los aspirantes no asociados. Con ello, se trata de crear una apariencia de actuación democrática, al ofrecer una imagen de sana variedad ideológica, que no se alcanza bien a comprender que sentido pueda tener en lo que debe ser la ordinaria actuación profesional de los Fiscales, siempre alejada de cualquier orientación política y guiada con exclusividad en la aplicación estricta –sin grandes y peligrosos alardes interpretativos- de la Ley.
Pues bien, las votaciones entonces se realizan de consuno y el reparto y préstamo de votos se efectúa con tan acabada aritmética, que las asociaciones resultan plenamente satisfechas, e incluso pueden reservar algún voto de carácter testimonial para aquel candidato –generalmente un buen profesional poco dado a los conciliábulos-, que por no estar asociado o no tener puesto en la ejecutiva de su asociación, recibe como consuelo la dádiva de uno o dos votos perdidos que pretenden dulcificar la afrenta de la que es objeto.
Es lo que en la declaración programática de la Asociación “Foro Judicial Independiente”, -en la que se agrupan los miembros de la Carrera Judicial que rechazan la idéntica política que a éste respecto siguen las tradicionales asociaciones de Jueces en el CGPJ-, se denomina gráfica y expresivamente como “cambio de cromos”. Política ésta, en la que dicha asociación, en aras de la defensa de la dignidad de la función judicial, se niega a cualquier tipo de colaboración.

SI UN JUEZ SE CORROMPE DEBE IR A PRISIÓN

Se acumulan los temas a tratar tras la vuelta de vacaciones: el nuevo caso de Garzón, las renovaciones del Consejo, el estado de algunos juzgados que he visitado este verano, las reperscusiones de la crisis en la Justicia... Pero antes de nada quiero manifestarme sobre una cuestión que me preocupa mucho. Una sentencia que considera probado que un Juez recibe dinero por actuar de una determinada manera en beneficio de quien le paga y no condena al Juez a una pena que conlleve necesariamente el ingreso en prisión, a mi me parece una sentencia poco ejemplar. Los Jueces (y lo que digo se ha de entender aplicado también a los Fiscales) gozan de un poder extraordinario que en ocasiones significa la posibilidad de cambiar la vida de las personas. Un poder que ha de ser ejercido necesariamente con imparcialidad. Un Juez corrupto traiciona muchas cosas muy importantes. Traiciona la función que se le confía; traiciona la confianza en la Justicia; lesiona los derechos de terceros. Y además representa la peor manifestación de lo que es la corrupción del funcionario. Si un juez se corrompe se coloca en situación de corromperse permanentemente, ya que está encadenado a quien le paga por un secreto criminal. Un Juez que actúa así, debe (en mi opinión) ingresar en prisión.