martes, 27 de octubre de 2009

TODO EL MUNDO HABLABA HOY DE LO MISMO

De las elecciones al Consejo Fiscal.  Se van perfilando los candidatos, que van a ser en esta ocasión muchos más que en cualquier otra ocasión.   La UPF ya designó a los suyos antes de verano, la AF los acaba de elegir y la APIF los hará públicos en breve.   Además va a haber otras candidaturas: el Fiscal del Tribunal Supremo Fernando Sequeros, que obtuvo un muy meritorio resultado, muy cerca de una plaza de vocal en el Consejo en las anteriores elecciones vuelve a intentarlo.  Esta vez en una lista con el Fiscal Jefe del TSJ Madrid, rara avis entre los fiscales jefes de grandes fiscalías ya que no está asociado ni a la AF ni a la UPF.   Desde luego eso si que es difícil, casi extraordinario, visto como parece que se distribuye el mérito y la capacidad en la Fiscalía.   En relación con esa candidatura, que seguramente se incrementará con una fiscal de Madrid, lo primero que debo decir es que me parece un obstáculo innecesario el requerir un aval de 45 fiscales no asociados.   Creo -con Jose María Caballero- que es una exigencia demasiado rigurosa, pero también creo que responde a una estructura de la Fiscalía en la que todo está montado de manera demasiado cerrada respecto de la carrera, casi con desconfianza hacia los fiscales.   Otra cosa que a mi juicio habría que cambiar.

3 comentarios:

  1. MUY BIEN,cuantos mas seamos mejor.

    Ahora solo falta conocer el nombre y numero de los candidatos de la APIF, auqnue uno de ellos sea conocido desde hace mas de un año.

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  2. Por cierto Salva, ¿quien apoyó para su elección y reelección a esa rara avis no asociada?.

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  3. Fiscalillo, es una historia antigua. En 2003, la época de las depuraciones de ciertos fiscales, Cardenal y Michavila querían remover a Mariano Fernandez Bermejo, jefe de Madrid, que tenía incluso un pleito contra el ministro. Había otros dos para depurar: Zato, Inspector Fiscal, decidió rendirse: no se presentó a la reelección, y le nombraron Jefe de la Unidad de Apoyo; Villarejo si se presentó: tenía la promesa del Consejo Fiscal de ser apoyado, pero luego no lo fue. En cuanto a Mariano, tras una serie de incidencias, ya que costaba encontrarle sustituto, el actual Fiscal Jefe de Madrid, que entonces estaba en la Técnica de Cardenal, aceptó la oferta. Contó con el apoyo de la AF (estoy seguro que de eso y de lo de Villarejo no te hablaron en el Congreso) a pesar de la diferencia del escalafón entre ambos (más de diez promociones entre ellos). Mariano -que tiene un carácter horrible y con el que yo tuve unas broncas inolvidables en la Fiscalia de Madrid- me dijo una vez que él no era rencoroso. La verdad es que no le creí (juzgo muy mal a la gente, es un defecto que tengo), pero años más tarde, cuando llegó la renovación del Fiscal Jefe de Madrid, yo pensé que lo iba a vetar desde su condición de Ministro: no lo hizo. Lo cierto es que Manolo Moix había hecho un buen trabajo en esos años y fue apoyado para la renovación por la AF y por la UPF.

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